Aumento de litigiosidad eleva costos para las empresas
Los comerciantes mayoristas están encendiendo las alarmas sobre el aumento de los costos laborales, especialmente tras la eliminación de una resolución que establecía límites para las cuotas de las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART). Según la Cámara del Comercio Mayorista (CADAM), este cambio ya se está sintiendo en los bolsillos, y no en el buen sentido. De hecho, afirman que el 65% de los jóvenes está trabajando en condiciones de informalidad, algo que preocupa a muchos.
Una de las inquietudes más notables es el aumento en tarifas de las ART, que se ha disparado desde enero. Esto se relaciona directamente con la decisión del gobierno nacional de suspender los topes tarifarios. En un informe, CADAM destacó cómo esta movida está impactando el sector.
En enero, se derogó la Resolución Nº 18 de la Superintendencia de Seguros de la Nación, que regulaba estas tarifas, provocando un aumento en los costos de las ART. Según las cifras, las cuotas de las aseguradoras pasaron de representar el 1,5% al 2,9% de la masa salarial a lo largo del año. Desde CADAM, se menciona que esta alza de costos está íntimamente relacionada con un incremento en la litigiosidad laboral.
En un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA), se subraya que las consecuencias de esta litigiosidad son socialmente graves. Esto se traduce en que los costos de los juicios se trasladan a la alícuota del seguro de trabajo que deben pagar los empleadores. Para ponerlo en perspectiva, entre 2004 y 2017, la cantidad de demandas saltó de 3.800 a 125.000 al año, mientras que la alícuota promedio se incrementó del 2% al 3% de la masa salarial. Tras la sanción de la Ley 27.348 en 2017, se logró una reducción significativa en la litigiosidad, pero, lamentablemente, desde 2022 este fenómeno volvió a dispararse.
El riesgo, comentan, es que si esta tendencia continúa, la sostenibilidad del seguro se verá comprometida.
Advierten sobre otros “costos ocultos”
A esto se suman los “costos ocultos” que involucran las paritarias. Más allá de los salarios, los empleadores enfrentan aportes obligatorios y contribuciones adicionales. Esto se vuelve aún más significativo en el Comercio, que cuenta con el convenio más grande del país, abarcando a 1,2 millones de trabajadores. Entre los aspectos más relevantes, se destacan:
- Contribución Solidaria por COVID-19: Impuesta desde el convenio colectivo de abril de 2021 a la obra social OSECAC.
- Instituto Argentino de Capacitación Profesional (INACAP): Donde el empleador debe aportar el 0,5% del salario de la categoría Maestranza A por cada empleado.
- Seguro complementario de retiro obligatorio La Estrella: Representa el 1,6% del salario, sin opción para elegir otro seguro. De este porcentaje, el 50% se destina a una cuenta individual del trabajador y el otro 50% al sistema solidario de retiro.
La acumulación de estos costos puede volverse una carga considerable para las pequeñas y medianas empresas, que luchan por mantener la estabilidad en un contexto económico complicado.